domingo, 2 de junio de 2013

A God Day To Die Hard (Critica)

Hola amantes del cine!

Hoy me explayare sobre una cinta que anoche me divirtió mucho; aunque por divertirme no quiere decir que sea una buena película. Estoy hablando de A God Day To Die Hard.

La quinta entrega de la saga Die Hard. Una saga que al menos sus tres primeras partes me volvían sumamente loco de niño. El prototipo de héroe de John McClane es lo mas ilógico de este planeta, y eso es lo que lo vuelve genial!.
Un hombre que puede vencer lo que sea y resistir lo que sea, por el solo hecho de ser un policía de New York; y si eres capaz de sobrevivir en esa labor en esa ciudad, eres capaz de todo. Esa es la premisa que envuelve al carismático personaje.

En esta película tenemos a un McClane claramente cansado, o tal vez no le da el físico a Bruce Willis. Escuche por ahí que es que Willis no le pone empeño y va al cobro fácil. Algo de lo que no estoy de acuerdo. Creo que Willis aprecia a su alter ego, pero o los años le pasan factura, o no estaba del todo contento con el guion. Cosa que yo creo mas lógica.

Le ponemos cara al hijo de John que ya ni sabíamos que existía, mas bien, no lo recordábamos, ese John Jr. aka Jack.
Este muchacho es un agente de la CIA envuelto en una intrincada misión (aunque luego vemos que la trama es muy burda) para rescatar a un preso político.
La película en su totalidad va girar en torno a Jack, en ese limbo de Hollywood que ya no le basta con reciclar sagas viejas y exitosas sino de tratar de introducir un nuevo personaje para que de algún modo se pase la antorcha a la nueva generación.

Careciendo prácticamente de diálogos, algo que uno hecha en falta ya que John McClane tiene una boca que le causa mas problemas que cualquier arma en su cabeza, la producción tiene muchos altos y bajos, haciendo caer al espectador en un aburrimiento y luego seguirlo de un "hu juju! esto es genial".
La verdad es que McClane siempre funciono mejor en un ambiente cerrado, esto de introducirlo en un Open World trae consigo la necesidad de dejar al espectador asombrado con una escena y no con como a lo "bruto" el personaje principal resuelve las cosas con sus manos.

Es la película mas floja de toda la saga. No tiene la novedad de la uno, la violencia de la dos, ni la reinvención de la tres. Y la cuarta fue mucho mas llamativa visualmente. Tal vez McClane solo pertenece a New York.
Sabemos que abra una sexta entrega, esperanzados de que sea la despedida del personaje de manera épica.
Algunos guiños a toda la saga se encuentran en este film. el mas evidente al final, ya lo notaran.

En resumen, y como todo lo que se termina, hay que rematarlo: Yippee-ki-yay, motherfucker!